Parece que estamos hablando de algo relacionado con la ciencia ficción, pero en la última versión de Adobe Photoshop podemos enfocar fotografías desenfocadas gracias a un nuevo filtro que todavía está en pañales, pero que ya ha empezado a andar.
Uno de los primeros recuerdos que tengo sobre las fotografías desenfocadas es lo fácil que sería solucionarlo en la ciudad de Los Ángeles en el año 2019. Metes una fotografía en papel y enseguida consigues ampliar, enfocar y todo lo que se te pueda ocurrir sólo con la voz. Nada de pantallas táctiles planas y con un aparato de estética analógica. Los más cinéfilos habrán descubierto que estoy hablando de una de las escenas de Blade Runner, una de las mejores películas de todos los tiempos. Desde entonces en todas las películas de espías que se precien encuentran una fotografía desenfocada y en un pis pas la enfocan y sacan los números de la matrícula del coche del asesino sin problema.
La trepidación es un mal que perjudica a muchas fotografías y otorga carácter a unas pocas. Incluso hay gente que niega que haya foto desenfocada buena, pero eso es otra historia. Normalmente las desenfocadas acaban en el vacío, en la papelera virtual de las propias cámaras. Nadie las quiere. Algunas se salvan, bien por despiste del autor o por ser un momento único e irrepetible del que nadie se querría desprender.
Esas fotos que se salvan a pesar de un mal enfoque quedan siempre en el limbo que ya no existe al parecer, pues siempre estamos a punto de borrarlas, pero siempre esperamos que alguna vez sea 2019 para poder salvarlas. Pues bien, no hace falta esperar tanto, sólo comprar la nueva versión de Adobe Photoshop, la CC, y dirigirse a:
Filtro > Enfocar > Estabilizador de imagen
Aquí tenemos la segunda versión de un filtro que tuvo una muy mala presentación cuando salió en Adobe Photoshop CS6 con el nombre de Deblurring, pues enseñaron una fotografía que había sido desenfocada por software… Y eso es hacer trampa.
Ahora funciona bastante mejor, pero sigue sin ser un filtro milagroso. Si fuera bueno, muchos lo utilizaríamos para todas las fotografías que hacemos sin trípode, pues conseguiríamos un plus de nitidez. Pero no lo recomiendo en absoluto. Es algo que utilizaremos para esas fotografías en las que no queda más remedio y por ver cómo las podemos mejorar, pero con pocas esperanzas. Pero os aseguro que es mejor que nada y que cada uno tendrá que decidir cuándo y cómo usarlo. Vamos a ver el procedimiento:
Preparamos una fotografía como acostumbremos, pero existiendo Adobe Camera RAW no tiene sentido seguir otro método, como no sea Lightroom.
Abrimos la fotografía en Photoshop como objeto inteligente. Es verdad que consume muchos recursos, pero si tenemos un buen ordenador con memoria RAM y un buen procesador no hace falta andarse con remilgos.
Vamos a la ruta especificada antes: Filtro>Enfocar>Estabilizador de imagen. Sirve para corregir la trepidación leve. El filtro recupera detalle gracias a los cálculos que hace de la dirección que tomó el objetivo mientras disparábamos. Nunca va a solucionar esa foto que hicimos después de tomar unas cuántas copas y en la que nos caímos sin mayores consecuencias. Soluciona el movimiento de cámara, no el movimiento del sujeto.
Es un filtro automático que se activa nada más convocarlo. Busca una zona trepidada de la imagen y trata de compensar el movimiento, exactamente igual que hacen los sistemas integrados en los objetivos, que cuando detectan que el usuario se mueve hacia la izquierda, mandan el conjunto estabilizado a la derecha.
Nosotros podemos elegir otras zonas para que el filtro haga su trabajo. Tenemos que ser capaces de discernir un tipo de movimiento y avisar al filtro para que haga otra corrección en ese sentido. Incluso, mediante la herramienta Dirección de desenfoque podemos dibujar un trazo que señale el desplazamiento que hemos observado en una zona de la fotografía. Todos estos trazos, los automáticos y los manuales quedan registrados y combinados en la ventana Avanzado del filtro. Combina los diferentes trazos e intenta conseguir el mejor resultado posible, que desgraciadamente pocas veces es óptimo. Incluso Adobe reconoce que sólo funciona en:
– Imágenes en interiores y exteriores capturadas mediante una lente con una distancia focal larga.
– Imágenes en interiores de una escena estática capturadas con una velocidad de obturación lenta y sin flash.
Como buen filtro tiene distintas opciones y herramientas para mejorar el resultado inicial, como Límites de trazo que determina cuántos píxeles están afectados por ese desplazamiento o Suavizado y Supresión de defectos que tratan de mitigar los efectos dañinos del filtro. Sinceramente recomiendo no utilizarlos pues la mejora es mínima. Eso sí, la lupa de Detalle es muy cómoda cuando damos al icono Desacoplar detalle.
En ningún caso va a igualar el resultado a una fotografía tomada con trípode, pero puede ayudarnos a mejorar un poco alguna imagen especial. La ventaja es que podemos elegir las zonas que afecta gracias a una sencilla máscara de capa. Es el principio de algo grande, que algún día se terminará solucionando. De momento nos tendremos que conformar con esta versión.
Fernando Sánchez Férnandez
27 de diciembre de 2013